Análisis de Sniper Ghost Warrior 3

En Sniper Ghost Warrior 3 asumes el papel de Jonathan North, al que envían a Georgia (el país, no el estado de Estados Unidos) para poner en orden algunos asuntos locales, aunque también tiene sus propios planes: se rumorea que su hermano desaparecido también está en el país. El juego parece una película de acción de los años ochenta, con personajes estereotípicos con acentos cerrados, y el argumento no se aparta de este estilo casposo, igual que sus mujeres objeto con (poca) ropa sugerente. Sin embargo, no se centra demasiado en la historia. Este título se caracteriza por la libertad de elegir cómo y cuándo realizas las misiones... o por lo menos en teoría.

Mientras que Sniper Ghost Warrior 2 proporcionaba una experiencia bastante lineal, esta tercera entrega ofrece algo completamente diferente. Ahora los paisajes son vastos y abiertos y van desde colinas con nieve a más colinas sin nieve. Hay mucha verticalidad (esa palabra que tanto les gusta a los desarrolladores últimamente) y no hay ninguna base enemiga o un pueblo que no tenga una colina o una montaña al lado. Son lugares ideales para buscar enemigos para después..., sí, has acertado, para después dispararles desde muy lejos.

North es un alpinista experimentado, por lo que se mueve muy bien en este terreno, aunque sólo si hay un camino marcado para hacerlo: sólo algunas rocas tienen algunos salientes de los que te puedes colgar. Sabrás cuáles son gracias a la visión de detective, algo necesario, ya que aunque dos rocas sean iguales, puede que no sean ambas escalables. A pesar de su experiencia, North todavía tiene dificultades a la hora de manejar las escaleras, pues por alguna razón tienes que presionar un botón adicional para dar el último paso desde el anterior peldaño, algo que nos molestó de inmediato.

Recorrer todos los lugares del juego es una parte esencial de la experiencia, pero en algún momento dado North tendrá que infiltrarse en un puesto avanzado o en una fortaleza enemiga. El juego asegura que puedes hacerlo como quieras, pero en realidad hay muy pocas opciones. Una valla tiene una hendidura en un lugar convenientemente encubierto y los enemigos dejan algunas áreas fuera del alcance de sus patrullas. Si vas a hacer caso omiso a estas pistas claras, deberás hacerlo con extrema precaución ya que lo más fácil es que te salga el tiro por la culata, mientras que ir pegando tiros a lo loco tampoco es una opción, puesto que los enemigos te pueden derribar en cuestión de segundos, por mucho que lleves chaleco antibalas.

Es esencial planificar el curso de acción y exploración para poder completarlas misiones de asesinatos, pero afortunadamente contarás con un pequeño drone que te ayudará, ya que marca a los enemigos con diferentes símbolos. Esto te permite diferenciar a los francotiradores y a los soldados completamente blindados de los soldados básicos, tal y como sucedía en Ghost Recon: Wildlands, pero nos da la sensación de que dependemos mucho de este drone. Básicamente, tienes que explorar todas las ubicaciones enemigas con el drone antes de incluso poder acercarte a ellas, y después de un rato, acaba siendo bastante aburrido.

Afortunadamente, el juego destaca en su mecánica de francotirador, especialmente en los modos de dificultad más alta. Por ejemplo, el nivel por encima de la dificultad básica sólo muestra la distancia y el efecto del viento sobre la bala, todo lo demás queda en manos del jugador. Esto hace que comprobar que has hecho los ajustes correctos cuando disparas un tiro a la cabeza de larga distancia resulte muy gratificante. Si te sale un buen tiro, también obtienes una cámara de bala similar a la de Sniper Elite (aunque en este caso no revientan órganos internos en rayos X).

Entre misión y misión, puedes comprar y mejorar tus armas en una base improvisada y también puedes fabricar y comprar más munición y equipos antes de aceptar tu próxima misión. Aunque no es nada especial, de hecho, fabricar tu propia munición resulta incluso absurdo, ya que teníamos tanto dinero que nunca fue un problema por lo que no necesitábamos buscar recursos porque siempre podíamos comprar lo que queríamos. Mal equilibrado.

El juego tiene un arsenal bastante impresionante disponible, que va desde rifles de francotirador a rifles de asalto, escopetas e incluso pistolas. Los más importantes son, naturalmente, los rifles de francotirador y se utilizan junto con una pistola. Ambos siempre deben estar equipados con un silenciador, de lo contrario, los enemigos te acabarán encontrando. Los rifles de asalto y las escopetas son sólo útiles en los interiores cuando las cosas van verdaderamente bien.

El juego está lejos de no tener fallos. Ya hemos hablado del guión, los personajes y de la incapacidad de North para lidiar con las escaleras, pero también hay muchas otras cuestiones que nos gustaría tratar. El mayor defecto es que es bastante insulso. No cuenta con casi ninguna innovación y todas sus mecánicas y armas de fuego ya se han visto muchas veces antes. Resulta fácil saber de dónde han sacado la mayor parte de sus ideas e incluso el pase de temporada tiene defectos. Puedes saquear puestos de avanzada enemigos y fortalezas con la esperanza de obtener materiales y deshacerte de los enemigos de esa zona de forma permanente, algo que también hemos visto ya, y en la mayor parte de las misiones secundarias debes asesinar a peligrosos criminales de guerra o rescatar a civiles, aunque, por alguna razón, también se incluyen algunas misiones de escalada en las que tienes que moverte por una montaña, misiones que no encajan con el juego en absoluto.

También hay algunos bugs molestos y defectos de diseño. Nos las arreglamos para quedar atrapados en el medio del paisaje, lo que nos obligó a volver a empezar desde el último puesto de control. Al no haber una función de guardado libre (algo que creíamos que era fundamental en un juego sandbox de mundo abierto moderno) teníamos que volver a jugar varias veces, ya que el último punto de guardado estaba demasiado lejos. Además, aunque sólo hay unas cuantas pantallas de carga, las que hay duran demasiado. Cuando comienzas el juego por primera vez, por ejemplo, podrías literalmente hacerte un café mientras esperas a que se cargue.

Puede que Sniper Ghost Warrior 3 lleve la serie al mundo abierto, pero no ha podido mantener nuestro interés. No es un mal juego, pero definitivamente podría haber tenido algunas ideas más originales y algunos toques brillantes propios. Dicho esto, si te gustan los shooters y eres fan de la serie Far Cry, lo más probable es que lo pases bien con lo que ofrece CI Games.