Starcraft II: Legacy of the Void - impresiones beta

Me gustaría comenzar este texto haciendo una apreciación respecto al género de la estrategia en tiempo real. Antaño fue uno de los géneros de videojuego que dominaba totalmente el mercado, mostrando un catálogo de exponentes enorme en PC mientras que el control por teclado y ratón se intentaba exportar torpemente a consolas (Starcraft salió para consolas en Norteamérica, por ejemplo).

A pesar de que hoy día el estándar de 'gamer' o 'jugón' medio apuesta por la acción más directa, quedando ciertos géneros como la estrategia en tiempo real o la aventura gráfica en un segundo plano, estos géneros se resisten a desaparecer y de hecho alegran a una considerable comunidad cuando, muy de vez en cuando, ven la luz algunos títulos excelentes de este tipo. Y por suerte esto está ocurriendo cada vez más en los últimos años. El único problema es que todavía no lo hacen demasiado a menudo (hablando de estrategia pura, no de gestión con estrategia al estilo Total War).

Starcraft II comenzó su andadura allá por 2010, con Wings of Liberty. El título fue ampliamente solicitado por parte de los fans acérrimos de la franquicia de los Terran, Protoss y Zerg, y se le respaldó a pesar de la polémica inicial generada porque el juego solo incluyera una campaña cada vez. En 2013 llegó el turno de la historia Zerg con Heart of the Swarm y ahora ha comenzado la beta del capítulo final que dará protagonismo a los Protoss, Legacy of the Void.

Para comprender bien los cambios que ha sufrido la mecánica de Starcraft hay que tener claro que un juego de estrategia no es como los del género MOBA, que reciben constantemente actualizaciones y cambios en sus mecánicas más básicas. Los parches de Starcraft se dedican a equilibrar cada vez más el sistema, y por tanto corresponde a las expansiones como Legacy of the Void mantener vivo el juego, dar la vuelta a la tortilla para que no puedan verse signos de estancamiento en un grande que lleva nada menos que cinco años en el alto plantel competitivo de los eSports.

Y lo está consiguiendo. La beta cerrada de Legacy of the Void es probable que sea una fase de pruebas muy larga, porque de momento solo se puede acceder a partidas 1 contra 1 y no al nuevo modo cooperativo o a la campaña, y sobre todo por los cambios elementales en los sistemas que Starcraft está sufriendo. Todo esto apunta a que llevará numerosos meses equilibrar totalmente los nuevos parámetros. ¿Terminarán para lanzar en 2015? Todavía no nos atrevemos a apostar.

Los principales cambios que he notado como jugador medio de Starcraft son pocos, pero afectan en profundidad la forma de jugar. El más tangible es que los recursos disponibles en cada uno de los espacios para base son menores. Esto aligera algo el tedio del juego temprano y obliga a los jugadores a arriesgarse antes a construir una segunda base o a ir por el contrario a intentar cazar al rival haciendo lo mismo.

Esto puede parecer una cuestión baladí pero este cambio altera totalmente el comienzo de las partidas, que se mostraba algo anquilosado e incluso lento y torpe, por mucho que sea un juego tan frenético y que depende tanto de grandes reflejos y APM (acciones por minuto) como Starcraft 2. Ahora el inicio de partida tiene un halo de 'mindgame' que seguro que hace las delicias de los más competitivos.

El segundo aspecto que ha cambiado en Legacy of the Void es incluso más radical que el anterior. En sus previas expansiones, Starcraft II daba mucha importancia a la gestión de recursos, al dominio del mapa, a la construcción de un gran ejército para estar bien posicionado y asaltar masivamente al enemigo. Todo este elenco de acciones es conocido en el argot de los jugadores como Macro. Anteriormente tener un buen control de la macro era prácticamente sinónimo de victoria. A pesar de que en Legacy of the Void el aprovechamiento de una buena macro sigue siendo importante, se ha potenciado mucho el buen uso de su contrapartida, la Micro. Jugar bien micro consiste en disponer los combates de forma que cada habilidad de cada unidad cuente. Saber bloquear a las unidades enemigas en campos de fuerza, mientras las tropas pesadas lanzan su fuerza contra los blindados enemigos y las unidades más ligeras acaban con la morralla enemiga. Dominar cada uno de los pequeños factores del campo de batalla es una buena micro, y ha ganado mucha importancia en Legacy of the Void.

Con el limitado acceso del que disponemos a los diferentes modos de lo que será Legacy of the Void al completo estos son los cambios que percibimos de una forma tangible y que podemos trasladar. A lo largo de nuestras dos semanas de partidas se han equilibrado las unidades varias veces, y todos estos factores juntos dan a entender que el período de beta va a ser prolongado pero va a merecer la pena, pues Starcraft II va a regresar por todo lo alto y lo va a hacer bien renovado. Así que afilad los ratones y preparad vuestras APM para nuestro siguiente informe cuando avance la beta de Legacy of the Void.