Tras informes bastante serios de que los usuarios de Steam deberían cambiar sus contraseñas para evitar que sus datos fueran robados gracias a una filtración, parece que las cosas no son tan graves como pensábamos al principio. Steam ha confirmado que ninguno de sus sistemas ha sido violado.
Así lo ha comunicado la propia Steam, que ha publicado en su página de la comunidad que, aunque todavía está investigando el origen de la filtración -en la que se enviaron mensajes de texto antiguos con códigos de un solo uso a números de teléfono-, parece que los datos filtrados no podían vincularse a cuentas de Steam. Esto significa que no se filtraron contraseñas, pagos ni información personal.
Por tanto, si has cambiado tu contraseña tras conocer la filtración de los datos de 89 millones de usuarios en línea, no pasa nada. Después de todo, nunca está de más cambiar una contraseña, pero parece que si no lo has hecho, sigues estando bien.
Steam recomienda que consideres sospechoso cualquier mensaje de seguridad de la cuenta que no hayas solicitado específicamente, y que compruebes la seguridad de tu cuenta con regularidad.