Análisis de Sunless Skies

Los suministros se han agotado. Lo que iba a ser un viaje normal a Port Prosper se tornó en una pesadilla, en gran parte debido a un desvío tonto para ganar algo más de dinero de camino hacia el norte, y ahora el viaje es una carrera frenética hacia un lugar seguro. La locomotora está muy dañada, el terror empieza a correr por nuestras venas y pronto tendremos que comernos al resto de la tripulación si queremos sobrevivir. Esto es Sunless Skies en su máxima expresión, un roguelite al que se debe jugar manteniendo un equilibrio entre lo seguro y lo arriesgado, en ocasiones jugándoselo todo por un tesoro prometido.

Su predecesor, Sunless Sea, era único en muchos sentidos. La idea de un juego de navegación lovecraftiano quizá no sea muy atractiva en un principio, pero el énfasis en la gestión de recursos y la vista aérea a la hora de explorar lo convirtió en una experiencia increíblemente tensa. No sabíamos si Failbetter podría mejorar la serie, y desde que Sunless Skies se anunció, nos preocupaba que lo que hacía especial al juego se diluyese al alejarse del oscuro confinamiento del Unterzee. Pero el estudio lo ha clavado.

El núcleo de este nuevo juego es el guión. Hay mucho texto que leer y no hay voz que lo haga ni escenas cinematográficas que nos muestren lo que está sucediendo. En un principio puede parecer negativo, pero el mundo de Sunless Skies se desarrolla maravillosamente gracias al trabajo de redacción realizado por los escritores de Failbetter. Ya se trate de mantener una conversación con un investigador solitario o de sabotear un barco abandonado en búsqueda de suministros, lo que está sucediendo siempre queda bien claro. Dicho esto, si no te gusta leer páginas y páginas de texto, te dará igual lo bien escrito que esté el juego.

La historia de Sunless Skies la decide en su totalidad el jugador. Al crear por primera vez tu capitán, escogerás un objetivo que tendrás que completar antes de acabar. Uno de los objetivos que escogimos, escribir un libro que fuese una obra de arte (por supuesto), nos llevó a buscar material para publicarlo durante todo el juego. Lo que es increíble es la gran cantidad de variables dentro de la historia de cada capitán, incluso si dos deciden escribir una gran obra pueden escoger entre diferentes estilos, escoger qué historias incluir, si las hacen o no controvertidas e incluso si se van a basar o no en la tripulación. Todas estas variables hacen que la historia personal de cada protagonista parezca única y especial, incluso si mueres docenas de veces.

El juego también tiene la historia personal de los oficiales a los que irás recogiendo en puertos. Bajo nuestro punto de vista, estas tramas son de lo mejor en cuanto a contenido secundario. Cada aventura puede tener diferentes resultados que pueden llevar a que el personaje se convierta en un buen compañero de tripulación y deje el barco habiendo completado su misión o habiendo incluso empeorado de forma permanente. Nos gustó especialmente la historia de una princesa que se une a la tripulación, por lo que recomendamos encarecidamente recogerla lo antes posible.

Además de la historia del capitán, la personalización de los personajes se puede conseguir mediante estadísticas derivadas de sus facetas basadas en el pasado y su título e imagen, algo básico. Las facetas, que suben de nivel con avances menores dentro de la trama, aportan un soplo de aire fresco al sistema de nivelación estándar teniendo en cuenta el tipo de juego que es Sunless Skies. Con tal énfasis puesto en la narrativa, el ser capaz de ampliar la historia de tu personaje ayuda a marcar aún más el tipo de persona que es. En cuanto al título y la foto, hay un gran número de elementos que te ayudarán a descubrir qué capitán quieres ser. Aunque estaría bien tener más opciones en cuanto a imágenes, la selección es lo suficientemente grande como para encontrar al menos uno que te guste.

Dicho esto, la historia en Sunless Skies no solo es contada mediante textos, ya que cada área que visites tendrá un diseño artístico fantástico. Sunless Skies tiene algunos de los escenarios más exclusivos que hemos visto en un juego indie, en gran parte debido a la forma en que Failbetter mezcla perfectamente fondos preciosos con elementos interactivos en primer plano. A veces puede resultar complicado diferenciar el fondo de los lugares tangibles, pero en principio no es complicado saber con qué se puede interactuar y con qué no.

En total hay cuatro mapas que explorar: The Reach, Albion, Eleutheria y The Blue Kingdom. Todos ellos tienen lugares únicos que investigar y sus propias misiones y facciones. Con cada capitán, los mapas explorados serán parcialmente aleatorios y el puerto principal en el que realizar la mayor parte de operaciones estará siempre en el centro. En Sunless Sea había un solo mapa, así que ampliar el número ha sido un acierto que ofrece mayor variedad en términos visuales y ayuda a ahorrarse tiempo de viaje entre un área y otra, algo que se hacía pesado al llevar más de 20 horas de juego.

¿Y cómo se explora esta área alienígena? El medio de transporte es tu locomotora espacial, que te llevará de un punto A a un punto B protegiéndote en el camino. Cada vagón tiene distintas ranuras de equipamiento disponibles en las que llevar todo tipo de armas y herramientas que permitirán ajustar la locomotora al estilo de juego que más nos guste. ¿Prefieres transportar muchos objetos de valor de un lugar a otro? Añade mejoras para ampliar el inventario. ¿Quieres tener una tripulación lo más grande posible? Pues haz más habitaciones.

La variedad de vagones y equipo disponibles para comprar nos proporcionó una clara pero no excesiva sensación de progreso. A menudo tuvimos que ponernos a ahorrar con la esperanza de comprar un nuevo y reluciente tren, y teniendo en cuenta el tiempo que se tarda en conseguir algunos de los artículos más caros, nos alegramos de que los herede el próximo capitán si el actual muere. En la mayoría de los roguelite es complicado ver signos de progreso, pero afortunadamente la calidad de la locomotora es algo que muestra los avances.

Si lo comparamos con Sunless Sea, una de las mejoras más notables es el sistema de combate perfeccionado. El sistema antiguo era uno de los fallos más destacables de la anterior entrega de la serie, pero afortunadamente ha sido completamente revisado. Ahora podemos esquivar y disparar con proyectiles sin necesidad de usar mirilla, por lo que el combate parece un aspecto importante y con calidad del juego y no solo una característica añadida a un título impulsado por la narrativa.

Por lo general, parece que Failbetter ha tomado nota de todo lo que se dijo de Sunless Sea y lo ha mejorado en Sunless Skies, consiguiendo una secuela que parece ser mejor en casi todos los sentidos. El juego es más grande, la jugabilidad es mejor, el mundo es más interesante y, a no ser que odies la lectura o no puedas con los roguelikes, no hay motivos por los que no jugarlo. Este juego puede ser una experiencia satisfactoria de 30 horas para unos y un viaje épico de más de 200 horas para otros, por lo que lo recomendamos encarecidamente.