Jude Bellingham se enfadó bastante cuando el VAR anuló su gol del empate el martes en la derrota por 3-1 de Inglaterra contra Senegal, y dio una patada al balón con el pitido final. Algunas personas han denunciado recientemente el temperamento de Bellingham, pero Thomas Tuchel, seleccionador de Inglaterra, defendió a su jugador... aunque admitió que puede ser "un poco repulsivo para mi madre".
"Me cuesta verlo", dijo Tuchel, cuando TalkSport le preguntó si Jude no debería ser titular debido a sus actuaciones recientes. "Creo que tiene que ser al revés, cómo podemos tener la mejor versión de él y la mejor aceptación, y que la gente entienda lo que nos está aportando y que está aportando cierta ventaja".
Sin embargo, el seleccionador alemán de Inglaterra admitió que su rabia "tiene que canalizarse hacia el adversario y hacia nuestro objetivo, no para intimidar a los compañeros ni para ser demasiado agresivo con los compañeros y los árbitros, sino siempre hacia la solución, hacia la victoria".
"Tiene un fuego y no quiero atenuarlo. Debe jugar con este tipo de fuego, pero el fuego viene con algunos atributos que pueden intimidar, quizá incluso como compañero de equipo", añadiendo que es un chico simpático, muy abierto, muy inteligente, pero para la gente de fuera, que sólo ve "la rabia, el hambre y el fuego, puede dar la impresión un poco repulsiva, por ejemplo, para mi madre cuando se sienta delante de la tele."
"Ella a veces no puede ver al chico agradable, educado y de buen comportamiento que yo veo".