Hoy en día, probablemente sean pocos los que lo recuerden o tengan alguna expectativa, pero en 2012 se reveló que Splinter Cell se convertiría en una película. Al año siguiente, se confirmó que el productor de John Wick, Basil Iwanyk, se encargaría de la producción, y en 2014 se anunció que Tom Hardy interpretaría a Sam Fisher.
Pero desde entonces, el proyecto ha permanecido en completo silencio, y ahora se ha anunciado que las razones son exactamente las mismas que probablemente ya te habías imaginado. En declaraciones a The Direct, Hardy ha dicho que está muerto:
"Esa película habría sido increíble... Simplemente no salió bien, ni de guion ni de presupuesto. Pero iba a ser genial. Tuvimos un millón de versiones diferentes, pero iba a ser dura e increíble. Es una de las que se nos escapó, lo cual es muy triste".
Pero no nos quedaremos completamente vacíos de Splinter Cell, ya que Ubisoft está trabajando en un remake del primer juego. Además... si se convierte en un gran éxito, nos sorprendería mucho que ninguna compañía cinematográfica quisiera volver a intentar filmar la aventura de Sam Fisher.