El avistamiento de un misterioso submarino frente a la costa de Dinamarca ha desatado la alarma entre las autoridades locales y los medios de comunicación. El buque, que al parecer fue visto el lunes por la mañana cruzando el emblemático puente del Gran Belt, se dirigía hacia el norte.
El canal de noticias danés TV 2 Denmark informó primero del incidente, aunque el origen exacto del submarino sigue sin estar claro. Aunque el Ministerio de Defensa danés se negó a confirmar si el submarino era ruso, reconoció que la embarcación iba escoltada por un buque militar danés, una acción rutinaria en tales circunstancias.
Este descubrimiento se suma a las crecientes tensiones en el Mar Báltico, una región en la que ha aumentado la actividad militar debido al recrudecimiento de las tensiones geopolíticas. Con Rusia y la OTAN enfrentadas, el Báltico se ha convertido en un punto álgido tanto de operaciones militares como de posibles intentos de sabotaje.
Hace tan sólo unos días, Suecia incautó un barco por presuntos daños a cables submarinos en el mar Báltico, lo que aumentó aún más la preocupación. En respuesta a todos estos incidentes, la OTAN ha incrementado su presencia en la región para garantizar la seguridad.