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Uncharted: El Legado Perdido

Uncharted: El Legado Perdido - impresiones

Nathan Drake ha cedido al testigo a dos nuevos personajes, pero eso no es lo más importante de esta nueva entrega.

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Comenzó como una expansión de Uncharted 4: El Desenlace del Ladrón, pero pronto se dieron cuenta de que tenía peso para funcionar por libre. Uncharted: El Legado Perdido se ha convertido en algo más que la historia que reúne a las chicas de Nathan Drake. Es un juego con carácter y personalidad propia, que además tiene la capacidad de mejorar en algunos aspectos a las entregas numéricas.

Shaun Escayg (Creative Director) y Arne Meyer (Communications Director) nos contaron que es una suma o, más bien, lo mejor de todos los Uncharted reunidos en un mismo título. De hecho, aunque las preguntas sobre la duración siempre son incómodas, Meyer reconoció que es más grande que la trilogía original, aunque más pequeño que la cuarta parte. Dependerá de cómo lo juegue cada uno, porque lo más importante, por encima de la trama, es la concepción del mundo que el equipo secundario de Naughty Dog ha escogido para esta ocasión.

Quizá sea la libertad que da no llevar a Nathan y sus número detrás, pero la primera impresión que nos deja El Legado Perdido es que se han permitido experimentar más, probar nuevas fórmulas sin miedo a decepcionar a los fans. Las mecánicas de combate o de conducción no han cambiado demasiado, pero sí cómo se ponen en práctica en estos nuevos mapas. Al menos en el que nos dieron a probar, una zona selvática de la cordillera de los Ghats Occidentales, en el área de influencia del antiguo Imperio Hoysala en torno al que gira la trama. Nos dijeron que es de un tamaño semejante al terreno de Madagascar de Uncharted 4, pero aquí hay más libertad. El mapa está abierto, los subobjetivos se pueden completar en el orden deseado y el combate es evitable.

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Lo que nos llevó hasta aquí es la búsqueda que Chloe Frazer y Nadine Ross han emprendido en conjunto, la del Colmillo de Ganesha. Se dice que este artefacto permitió al antiguo emperador Hoysala controlar a sus súbditos sin oposición. Es la misma razón que mueve a Asav, el malo, un fanático de las antiguas monarquías que espera poder emprender así una restauración. Para conseguirlo dispone, cómo no, de un ejército privado que nos va a plantar cara en la expedición. La introducción a esta misión es el tráiler que ya vimos hace un tiempo con las dos buscadoras en un bote, averiguando cómo usar un amuleto. Es un reflejo de la relación tensa entre ambas, unidas tan solo por el interés y por sus capacidades, más que por ese hombre en común.

Escaig nos reveló que Uncharted: El Legado Perdido va a contar por fin quién es Chloe y, sobre todo, cómo es. Hasta ahora hemos conocido a su parte egoísta, que se escaquea ante los problemas. Ha llegado el momento de saber "por qué siempre se larga en el último momento y deja a la gente colgada", y a ella, el de comprobar si es capaz de liderar a un equipo, con el sacrificio por los demás que eso implica.

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Sony nos dejó literalmente en el medio de ningún sitio, con una brújula, un coche y tres artilugios del pasado por encontrar. De nosotros depende decidir cómo nos vamos moviendo y cuáles de los puntos de interés marcados son realmente interesantes. Conducir, parar, explorar y seguir. Esa es la rutina, que puede hacer que las partidas se alarguen más de lo que acostumbrábamos en el pasado. La búsqueda de cofres y artilugios va a ganar peso con este sistema. No era un mapa plano, era enrevesado y repleto de alturas, un elemento que sigue ganando peso.

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Tras una hora de partida, nos encontramos en unas ruinas abandonadas tras haber dejado atrás batallas que ponen a prueba las manos y puzles que hacen lo propio con la materia gris. Aunque la acción sigue predominando, hubo ocasiones en las que literalmente no había manera de vencer por la fuerza, así que la solución era escabullirse y acabar con ellos con sigilo. Las mecánicas y controles son idénticos, incluida la presencia del gancho. La novedad es una ganzúa para abrir cofres, un poco de relleno para recompensar la exploración.

¿Pero cómo se combinan estos dos personajes? Chloe es hija de un arqueólogo especializado en la India y tiene mucho que contar a Nadine (y a nosotros) sobre la cultura durante el viaje. Eran zonas con vegetación voluptuosa, paisajes muy verdes salpicados por cataratas y construcciones ancestrales que perviven en el tiempo. La estética recuerda mucho a los juegos anteriores, aunque en teoría estemos en otro sitio. Mientra que la protagonista vende su papel de superviviente con la que empatizar, Ross equilibra con su compostura fría y calculada.

En esta demostración solo controlamos a la primera, mientras que la IA se encargaba de la segunda. No es fácil crear un buen personaje de acompañamiento, como hemos visto en tantas ocasiones. Unos pecan de sencillez, como Bioshock Infinite, y otros de un realismo que nos obliga a estar pendientes todo el rato. El comportamiento de Nadine es una de las cosas que más nos ha gustado de esta prueba. No tuvimos que preocuparnos mucho de ella, más bien al contrario, nos salvó el pellejo en más de una ocasión. Lo que convence es que su comportamiento encaja con la actitud que nos vende Naughty Dog.

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Incluye durante las fases de diálogo, en las conversaciones sencillas que van saltando entre ambas mientras nos movemos y exploramos, notamos que el humor sarcástico de Chloe casa bien con la personalidad de Nadine. Se antoja que puede surgir una amistad entre ambas, aunque esto es pura especulación. Es como si la primera tuviese la capacidad de llenar el hueco que deja Drake al despedirse de la saga, firme candidata a su propia serie.

Si juntamos nuestra primera valoración de un único escenario y lo que nos han contado los creadores del juego, la expectativa por Uncharted: El Legado Perdido, ha crecido considerablemente tras esta toma de contacto. Se aprecia el arrastre de los materiales anteriores, con tan poco tiempo de desarrollo estaba claro que iba a ser así, pero nos agrada que intenten utilizarlos de una manera distinta. Puede ser un spin-off, con menos presupuesto, pero a cambio se permite algunos giros que Nathan Drake no hubiera aceptado. Dejarle fuera y dar entrada a nuevos protagonistas es un tomar riesgo del que Naughty Dog puede salir reforzado. Veremos si hay riqueza suficiente en el resto del título, si esa exploración se sostiene o es solo una pérdida de tiempo y si la relación entre los personajes tiene finalmente sentido o si todo esto no es más que un mero reclamo.

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