Warner Bros. Discovery y la BBC se enfrentan a críticas por su continuo apoyo a J. K. Rowling, a raíz de la postura cada vez más controvertida de la autora sobre las cuestiones transgénero. Según Deadline, se acusa a las empresas de aplicar un doble rasero en sus políticas de diversidad, equidad e inclusión (DEI), especialmente tras respaldar a Rowling en medio de su endurecida retórica sobre los derechos trans.
Warner Bros. Discovery colabora con Rowling en la próxima serie de Harry Potter para la plataforma de streaming Max de HBO, mientras que la BBC estrenó recientemente la sexta temporada de Strike, basada en las novelas de Rowling bajo el seudónimo de Robert Galbraith. La autora es productora ejecutiva de ambos proyectos.
Los miembros de la comunidad trans, especialmente los que trabajan en los medios de comunicación, han expresado su preocupación por las decisiones de las empresas, señalando que el lenguaje de Rowling sobre cuestiones trans ha pasado de un desacuerdo comedido a una retórica más incendiaria en los últimos cuatro años. Estas personas argumentan que apoyar a Rowling contradice las políticas internas de DEI de ambas organizaciones, sobre todo en lo que respecta al trato de los empleados transgénero.
En respuesta, Warner Bros. Discovery ha declarado que Rowling tiene "derecho a expresar sus opiniones personales", al tiempo que subraya que su participación en la serie Harry Potter beneficiará al proyecto. La BBC, por su parte, declinó hacer comentarios sobre las opiniones de Rowling, pero reiteró su compromiso de crear una plantilla integradora que refleje la diversidad del Reino Unido.
Los críticos sostienen que las acciones de ambas empresas socavan sus compromisos públicos con la inclusividad. Bamby Salcedo, director general de la Coalición TransLatin@, expresó su decepción por la "confusión" causada por los mensajes progresistas de Warner Bros. Discovery dirigidos al personal, que contrastan con su apoyo a Rowling. Del mismo modo, Freddy McConnell, periodista transexual, sugirió que el respaldo de la BBC a Rowling podría reforzar la percepción de que la cadena es "institucionalmente transfóbica".
El debate ha provocado una mayor división en el sector, ya que algunos piden que se separe el arte de la política, mientras que otros sostienen que apoyar económicamente a Rowling posibilita sus opiniones, que financian causas antitrans. La controversia ha planteado importantes cuestiones sobre el equilibrio entre la libertad artística y la responsabilidad empresarial en un panorama cultural cada vez más polarizado.
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