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Xbox presenta su plan para acabar con la toxicidad online

Propone "construir una comunidad gaming positiva" a partir de cuatro niveles de filtro de contenidos y el bloqueo de términos.

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Microsoft ya ha demostrado en varias ocasiones su preocupación por la toxicidad online, y el propio Phil Spencer, vicepresidente y responsable de su división de videojuegos se subió a un escenario junto a sus competidores para mandar un mensaje de unidad frente al mal comportamiento en los chats y en el multijugador. Ahora ha presentado lo que llaman "nuestra visión del filtrado de contenido", un plan para "construir una comunidad gaming positiva".

El plan se basa en aplicar cuatro niveles de filtración a los mensajes que se comparten a través de Xbox Live en sus distintas forman. Por sus nombres en inglés serían friendly, medium, mature y unfiltered. El primero, amistoso, es el que se establecerá por defecto para los niños, mientra que el medio solo bloqueará palabras malsonantes, discriminatorias o que puedan constituir bullying. En la categoría superior estaría una protección para adultos que no quieren estar escuchando lenguaje ofensivo y quienes quieran dejarlo abierto escogerían "sin filtro".

Como no todas las relaciones personajes son iguales, el sistema permite asignar una categoría distinta a cada usuario de forma manual, independientemente de cuál sea la establecida de forma general. Después, el sistema automatizado se encarga de aplicar estos filtros y de mejorarlos mediante machine learning. Para que su aprendizaje y evolución sea correcta, también piden la colaboración de los propios jugadores.

El filtro en niveles está funcionando ya en forma de beta para los usuarios del programa Insider de Xbox y esperan poder lanzarlo para el público en general antes de que acabe el año en 21 idiomas distintos. Funcionará en consolas, en PC y en las app para móvil Xbox Live, pues su intención es que esté en todos los servicios del ecosistema, incluido su muro de actividad.

El problema de estos sistemas es que los lenguajes están vivos y, ni las palabras tienen siempre el mismo significado o utilidad, ni es necesario recurrir a conceptos catalogados como malsonantes o discriminatorios para acosar a determinadas personas. Habrá que seguir su evolución para comprobar si cumple su cometido y ayuda a mejorar un ambiente que necesita sí o sí una revolución de humanidad.

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