Zombie Army 4: Dead War - impresión final

Rebellion ha demostrado una y otra vez que es un estudio que va por libre, aprovechando al máximo su experiencia en los juegos de acción y manejo de las armas. Su especialidad es la Segunda Guerra Mundial, explorada con el realismo de Sniper Elite y con el humor de Zombie Army. Esta segunda versión toma el relevo a principios de este 2020, y antes de que llegue hemos podido pasar cuatro horas matando cientos de nazis-zombi con una versión casi final del juego.

El guión absurdo de Dead War nos lleva al año 1946. No al de nuestro universo, sino a otro paralelo en el que la GMII aún continúa. Porque los nazis de Adolf Hitler se niegan a terminar con imperio de terror y han decidido sacrificar lo poquito que les quedaba de alma para continuar combatiendo hasta después de muertos. Este relato se apoya en una buena dosis de pseudociencia, portales demoníacos y ocultismo. Una excusa lo más retorcida posible para no tener remordimientos a la hora de dar muerte a los adversarios.

Esta cuarta entrega se parece bastante a la anterior y, así, no es fácil apreciar las innovaciones desde un primer momento. Por ejemplo, nos hemos dado cuenta de que los mapas y la arquitectura tienen algo del pasado, hasta nos ha evocado a algunos de los mejores juegos de zombis como Left 4 Dead. Hay que completar misiones cortas en zonas interconectadas, trabajando siempre en equipo y sin respiro para desbloquear el paso al área segura más próxima. Y vuelta a empezar.

Uno de los campos que más han crecido con respecto a los títulos anteriores del estudio y, sobre todo, con su último juego (Strange Brigade) son las habilidades de cada personaje. Por ejemplo, hay un golpe cuerpo a cuerpo que mata a un zombi normal de un solo golpe, pero solo si está totalmente cargado, no mientras se recarga. Hay un sistema de progresión asociado al equipamiento y al armamento que tiene buena pinta. A medida que avanzan las misiones van entrando en escena añadidos básicos que demuestran que se han esforzado en diseñar todo este bloque del gameplay. Si completas todos los retos relativos a un rifle ganas un potenciador de daño permanente que, además, afecta positivamente al resto de rifles y herramientas. Es decir, que invita a usar varias armas y no cebarse siempre con las mismas.

Puede que recordéis el modo horda de Sniper Elite 4, una demostración del potencial del juego en sentido de acción pura. Ese fundamento está presente en Zombie Army 4, pero alimentado por otros componentes extra. Tenemos los dispositivos tácticos con los que mantener a los no-muertos bajo control, como minas, granas o alambradas electrificadas. Y cobran mucho sentido gracias al diseño de juego, porque Rebellion ha sido capaz de transformar momentos aparentemente pacíficos en un situaciones caóticas en cuestión de segundos. Han introducido varios tipos de enemigos que no son fáciles de abatir, de modo que un jugador que haya quedado rezagado va a sufrir mucho para sobrevivir.

Como la muerte no es definitiva en Dead War para los malos, tampoco lo es para los buenos. En los modos que hemos probado, si un jugador del equipo cae en una parte intermedia del mapa y no da tiempo a salvarlo, resucita automáticamente en el siguiente punto de guardado. Pero ese cuerpo reanimado se va arrastrar por el escenario.

Lo que nos hemos encontrado tiene mucho que ver con la última entrega de su shooter de la Segunda Guerra Mundial. Sin embargo, se aprecia el trabajo acumulado sobre los pilares del producto. Ya en esta versión hemos podido apreciar mejoras en efectos de iluminación en una misión que tiene lugar dentro de un búnker. Pero también hay otros aspectos que son distintos, como es la conciencia sobre la cantidad de balas a gastar y a conseguir para salir airosos. Volviendo al diseño de niveles, hay un esfuerzo por ofrecer más elementos interactivos dentro de los escenarios que hemos tenido a bien utilizar como trampas. Un helicóptero medio roto siempre puede ser una bonita trituradora.

Tras esta sesión de juego cooperativo tuvimos la oportunidad de charlar con los creativos y nos contaros algunas ideas chulas que tienen preparadas y aún no hemos visto. En esta entrega habrá más vehículos, a los que se les ha dado un rol de exagerar sobre un concepto ya tremendo. También vamos a tener ocasión de interactuar con animales zombis no tan habituales en los bestiarios de videojuegos. Por su forma de hablar, diríamos que se lo han estado pasando bien en las reuniones de brainstorming.

Al fin y al cabo esto es lo que debe hacer que Zombie Army 4: Dead War tenga una seña de identidad propia. Rebellion ha preferido trabajar con sus herramientas de toda una generación y pulirlo al máximo en lugar de ir a por innovaciones de gran calibre. De momento tenemos una buena idea sobre qué es lo que están proponiendo, que además prometen engordar con retos semanales y eventos de temporada después de lanzamiento. Veremos en qué queda cuando se estrene el 4 de febrero para PC, Xbox One y PlayStation 4.