Darksiders: The Forbidden Land es un juego de mazmorras con cartas

Nos quedamos helados al conocer la edición Nephilim de Darksiders: Genesis porque costará 379,99 euros. ¿Qué ha metido ahí THQ Nordic para que tenga ese precio? Además del juego con todos los elementos típicos de un empaquetado especial y de una figura de Lucha de más de 20 centímetros, incluye el juego de mesa Darksiders: The Forbidden Land. Ha llegado el momento de conocerlo mejor.

Lo definen como un juego de mazmorras cooperativo para jugar en solitario o hasta en grupos de cinco. Te puedes escoger a cualquira de los cuatro Jinetes del Apocalipsis y contruirte un mazo de cartas con una serie de naipes diseñados en exclusiva para cada uno de ellos. Pueden ser cartas de movimiento, de ataque o de mejora. Enfrente esperan 61 figuras ya pintadas contra las que combatir en la campaña, que consta de 19 misiones repartidas por varios escenarios.

Una vez completado el libre de campañas, los jugadores van a poder crear sus propias historias y usar los elementos para dar vida a más mundos de juego. La condición principal que debe cumplirse es que, si hay cinco personas, uno debe ser el máster. En caso de que sean menos, se puede jugar sin ese rol, siguiendo unas nomras escritas en el libro, aunque los creadores recomiendan tener un humano a cargo del mal.

Aquí podéis echar un vistazo a los muñecos de Darksiders: The Forbidden Land, que más allá de la edición especial no está relacionado con este Darksiders: Genesis de Airship Syndicate que llega a finales de año a Nintendo Switch, PS4, Xbox One y PC.