El ministro de Defensa de Israel ha ordenado al ejército que elabore un plan para la "salida voluntaria" de los residentes de Gaza, informaron medios de comunicación israelíes, tras la propuesta del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de tomar el control de Gaza y transformarla en la "Riviera de Oriente Medio".
La propuesta ha desatado intensas críticas globales, con potencias mundiales como Rusia, China y Alemania condenándola por temeraria e inhumana. El gobierno israelí parece dividido, ya que el primer ministro Benjamin Netanyahu calificó la idea de Trump de "extraordinaria", mientras que muchos otros advirtieron del caos geopolítico que podría desencadenar.
El ministro argumentó que las naciones críticas con las acciones militares de Israel, entre ellas España, Noruega e Irlanda, deberían aceptar ahora a los palestinos desplazados como parte de sus obligaciones legales. Mientras tanto, Hamás denunció el plan como absurdo, y potencias regionales como Arabia Saudí y Jordania rechazaron cualquier desplazamiento forzoso. El frágil alto el fuego en Gaza pende de un hilo mientras continúan las discusiones.