Parece que las cifras de ventas de Xbox Series han tocado techo, y el hardware está disminuyendo rápidamente en ventas, mientras que Microsoft se muestra imprecisa sobre su estrategia futura, e incluso Sony ha dicho recientemente que "A medida que nos adentramos en la segunda mitad del ciclo de la consola, esperamos que el número de nuevas unidades vendidas de PS5 disminuya gradualmente".
Básicamente, después de tres años y medio en esta generación, nos encontramos en la segunda mitad del ciclo. Esto nos lleva a sospechar que tanto Microsoft como Sony están trabajando febrilmente en sus próximas consolas, pero hay muchos indicios de que están adoptando un enfoque ligeramente distinto.
Porque mientras innumerables rumores de fuentes fiables afirman que Sony está trabajando en un modelo de PlayStation 5 Pro que saldrá a finales de este año o principios del próximo, Microsoft en febrero habló, en cambio, de la próxima generación prometiendo "el mayor salto técnico que jamás hayas visto en una generación de hardware". Pero, ¿cuándo empezará realmente ese salto?
Según la gran filtración de Microsoft del año pasado durante el juicio con la FTC, tanto Microsoft como Sony estaban considerando lanzar nuevas consolas en 2028. Pero la información no estaba del todo actualizada, y desde entonces Microsoft ha comprado Activision Blizzard, pero no ha conseguido impulsar las ventas de Xbox Series, y una persona con información privilegiada, al menos razonablemente reputada, afirma haber oído que la próxima Xbox llegará en 2026. Y dado que no parece que vaya a llegar un modelo de Xbox Series X más potente, las posibilidades de que esto sea cierto aumentan.
Y ahora el fiable Insider Gaming se une al coro, citando a un 'dataminer' de Call of Duty que afirma haber recibido pruebas creíbles de que la próxima consola de Xbox se lanzará en 2026. Y no solo eso, al parecer se lanzará junto con el Call of Duty de ese año.
De ser cierto, cabe sospechar que se han invertido recursos adicionales en ese juego en concreto para convertirlo en una instalación destacada de la serie, y lanzar un hardware potente al mismo tiempo para ofrecer la mejor versión del título es, por supuesto, un gran negocio (hay muchos fans de Call of Duty), y como se incluirá con Game Pass, la gente ni siquiera tiene que comprar el juego para jugar.
Por supuesto, se trata de información no verificada, así que tómala con razonable cautela, pero no parece una estrategia del todo descabellada.
¿Tú qué opinas?