Los juegos digitales están creciendo rápidamente y varios grandes minoristas de todo el mundo han reducido o incluso dejado de vender juegos físicos en las tiendas. Pero, por supuesto, todavía hay mucha gente que no se cree dueña de un juego hasta que tiene un cartucho o un disco en las manos, una caja que pueda añadir con orgullo a su preciada colección en la estantería.
Entonces, ¿cómo será en el futuro, cuando Microsoft y Sony en particular han empezado hace tiempo a lanzar consolas sólo digitales? Por supuesto, no tenemos una respuesta a eso, pero sí sabemos que a los que les gustan los juegos físicos tendrán un amigo en Nintendo la próxima generación.
Durante la presentación del último informe financiero de Nintendo, el director ejecutivo de la empresa, Shuntaro Furukawa, explicó que seguirán apoyando los juegos físicos:
"Nuestro objetivo no es simplemente aumentar la cuota de ventas digitales, sino maximizar las ventas totales de software de juegos, incluidas las ventas de software físico. Esta política se mantendrá sin cambios en el futuro".
Conforme vemos semana a semana en Gamereactor con las ventas españolas de videojuegos, son las fabricantes de hardware y las publicadoras de juegos que apostan en ocasiones por ediciones especiales y para coleccionistas las que marcan las tendencias. El verde Xbox queda en una representación residual en las listas, las cajas azules de PS4 tuvieron una ratio mucho más alta que las blancas de PS5, mientras que las cajas rojas de Switch siempre coparon los tops de ventas porque existe mucha más cultura física entre su público y porque Nintendo la promueve.
Dicho esto, fabricar consolas para juegos físicos las hace más grandes y más caras (además de tener más componentes que pueden romperse). ¿Qué opináis, sigue siendo correcto seguir invirtiendo en juegos físicos, o debería Nintendo centrarse en una nueva generación digital?