Watch Dogs

Toda esa información personal está disponible para cualquiera con ciertos conocimientos... y Aiden Pierce ha llevado esos conocimientos hasta una forma de arte.

Su voz ronca y profunda nos deja claro que no sabemos nada y que él sabe todo lo que hay que saber. Concretamente, ahora mismo sabe todo lo que hay que saber sobre su objetivo, Joseph DeMarco. El viento sopla entre los rascacielos de Chicago en pleno otoño. Aiden se sube el cuello del y se ajusta el abrigo antes de dirigirse a su marca con paso determinado.

Así comienza lo que todos conocen ya como la mayor sorpresa del E3 2012: Watch Dogs haciendo de espectacular cierre de la presentación de la compañía gala Ubisoft en Los Ángeles.

Sin logo, sin una introducción repleta de pompa y palabrería. Simplemente, luces apagadas en la sala y un tráiler con mucho texto, con la limpieza que puso de moda Mirror's Edge, que pasaba directamente a un Aiden Pierce paseando en tiempo real por una preciosa recreación de la ciudad, primero con las hojas y las ropas mecidas por el viento, luego cubierta por la lluvia y por la noche.

El prota saca su smartphone y se aproxima hacia la galería donde Joseph DeMarco expone su colección digital "dot conneXion". Una larga cola espera en la puerta de la sala, 'segurata' incluido plantado en la puerta Aiden toquetea su teléfono y en unos segundos desactiva todas las comunicaciones móviles de la zona.

La cámara se mueve lentamente para captar la confusión generada por tanto teléfono escacharrado (con lo enganchada que está la sociedad moderna). Con el lío, el gorila de la puerta, que también estaba hablando por el dichoso aparato, pierde su posición y deja un hueco ideal para colarse.

Dentro, tras un breve diálogo con un tipo llamado Jordy (que también tendrá un papel relevante en el juego), Aiden consigue una pistola y la esconde en el abrigo.

Aiden es capaz de escanear a los invitados a la gala. Accede a toda su información personal y a sus huellas dactilares, con una visualización similar al 'Animus' de la serie Assassin's Creed: cajas 2D superpuestas sobre cada personaje que se cruza, ficheros de datos flotantes mucho más intrusivos que un examen médico. El texto claro y legible que va apareciendo en pantalla detalla los credenciales de cada persona y su nombre, destacando además aspectos destacados. Robos, evasiones de impuestos, enfermedades conocidas... o historial de empleo.

Pronto, una secuaz del objetivo conversa con DeMarco y deja a Aiden toda la info que necesitaba. Es hora de salir de la sala detrás del 'artista', de perseguirle por la increíble ciudad. Fuera esperan esa noche y esa lluvia, con el tráfico habitual de las últimas horas de la tarde y del clima. Brillos y reflejos de cada fuente de luz afectan a cada peatón o vehículo que en ese momento atraviesa el aguacero. Sólo estamos a una manzana de la galería, pero sin duda la ilusión de una gran ciudad que se extiende en la noche es total.

Hora de volver a 'hackear': Aiden saca su teléfono para intentar detener la huida de DeMarco, esta vez poniendo todos los semáforos en verde en un mismo cruce, provocando un grave accidente. El objetivo sobrevive, pronto respaldado por algún tipo de guardaespaldas.

Es hora de entrar a la acción, de conocer algo más el combate de Watch Dogs y la agilidad de Aiden. Los coches estrellados sirven de improvisada cobertura, el diálogo de ráfagas de fuego sigue su curso a toda velocidad. Aiden se esconde, salta, corre, rueda, dispara. DeMarco está solo y acorralado. Muerto. Las sirenas de policía ya se oyen cerca, pero el protagonista es capaz evidentemente de hacerse con cualquier coche en las proximidades. Pisando a fondo, sólo queda 'hackear' un puente para que se abra en el momento justo, saltando con el deportivo y dejando a la policía detrás.

Play: la demostración del E3 en acción

Esta es la última escena avanzada del juego antes de que las luces vuelvan a encenderse durante la conferencia de Ubi, a la vez que comienza clamorosa ovación. Mientras Pierce escapa, la cámara se retira, vuelve a los cielos y momentáneamente se fija en un individuo solitario, alguien que espera en lo alto de un edificio. Algún comentario mediante radio o móvil y comienza a correr.

Cuando lo hace, la cámara sigue su vuelo inicial hasta que la ciudad vuelve a mezclarse con la ya mítica imagen que arrancó el tráiler previo a la demostración, ahora con el misterioso personaje marcado con un icono. Pero no está solo: justo antes de que aparezca el logo final, brotn más y más iconos con sus respectivos nombres por el mapa de la ciudad.

La demo fue un éxito instantáneo. Quizás una sección tan breve no sirva para mucho, pero según vamos pelando las capas de lo mostrado hasta ahora, más y más detalles de Watch Dogs salen a la luz. Watch Dogs está ambientado prácticamente en la era contemporánea: te dejan en mitad de un juego de mundo abierto en el que el 'hackeo' y la sociedad de la información son partes integrales del concepto.

En el mundo de Watch Dogs la ciudad depende de una enorme network (denominada CtOS o Central Operating System), una red siempre en línea que registra la información de todo el mundo. Aiden Pierce cuenta con la habilidad y herramientas necesarias para acceder, mientras que toda la gente con la que se cruza tiene su propia historia: cada habitante vive una vida escrita por los guionistas de Ubisoft.

Aiden es capaz de cotillear en las conversaciones, echar un vistazo a las grabaciones de vigilancia y colarse en prácticamente cualquier dispositivo... o incluso acceder a cuentas bancarias. La idea de Ubi de una sociedad conectada constantemente es también la de una sociedad donde todo se puede manipular y/o controlar de alguna forma.

La intención es dejar al jugador hacer lo que quiera con la información que va recopilando, ofreciendo diversas formas de afrontar cada misión. Las acciones también tendrán consecuencias, podría existir daño colateral (como el accidente de tráfico que provoca Aiden en el cruce) y parece que también habrá dilemas morales algo más complejos durante el transcurso del juego.

Ubisoft no utiliza el término 'smartphone' cuando habla del dispositivo que lleva Aiden, sino que lo llama "Profiler". Nos enseñaron cómo se podía utilizar este aparato para entrar en las cámaras de seguridad cercanas, para que Aiden tenga todas las ventajas. Por ejemplo, el Profiler también puede servir para atascar las comunicaciones de la policía en plena persecución.

En pleno combate, Aiden vuelve a recordar a Assassin's Creed mientras esquiva balas y se mueve sobre los obstáculos o pasa por debajo de ellos. El estudio de Montreal también pretende lanzar una aplicación para iPad (obviamente conectada) que sirva para complementar la experiencia de juego, enviando información sobre la ciudad y sobre el progreso durante el juego. Pero aún hay más. También habrá posibilidad de seguir el proceso y el estado de los amigos, descubriendo cómo plantean cada reto. Funcionará de forma parecida al Autolog de Need for Speed: Hot Pursuit, finalmente recibiendo y enviando desafíos. Ese final de la demo con un guiño al multijugador también implica que existe la posibilidad de compartir la ciudad con otros jugadores, pero de momento poco se sabe al respecto (más allá de lo que sugiere el estudio en la entrevista con GRTV desde el E3). Está claro que, con tanta conexión, también habrá que conectar a los jugadores de algún modo.

En estos momentos no sabemos mucho más de Watch Dogs. Ni siquiera tenemos claro que sea capaz de salir al mercado antes de la próxima generación de consolas. Aparte de la versión para PC, completamente confirmada, se han mencionado adaptaciones para PlayStation 3 y Xbox 360, pero por el momento se hace complicado imaginar un juego así en estas plataformas.

Warch Dogs fue todo innovación y promesa en Los Ángeles, por lo que brilló aún más en un E3 bastante plano y predecible en líneas generales. Por fuera, parecía como la primera demostración de lo que deparará la próxima generación de consolas. Por dentro, prometía un océano de profundidad y un mundo abierto para conquistar. Estamos deseando conectarnos y saber algo más de Watch Dogs.

Play: la entrevista de GRTV con Dominic Guay

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