En las últimas consecuencias de los despidos masivos dirigidos por el Departamento de Eficiencia Gubernamental de Elon Musk, varios trabajadores de la administración estadounidense con autorizaciones de seguridad de alto secreto fueron despedidos sin recibir las habituales instrucciones de salida, según revelaron algunas fuentes (vía Reuters).
Estas sesiones informativas, que son una parte normal del proceso de salida de los trabajadores con autorizaciones de seguridad sensibles, incluyen recordatorios sobre acuerdos de confidencialidad, la firma de formularios legales e instrucciones sobre qué hacer si se acercan adversarios extranjeros.
La ausencia de estas sesiones informativas, sobre todo para los empleados que manejaron información clasificada relativa a la seguridad nacional, hace saltar las alarmas entre los antiguos funcionarios de seguridad sobre los riesgos potenciales de espionaje y otras amenazas.
Sin estos pasos cruciales, los antiguos empleados pueden convertirse en objetivos de agentes extranjeros, que a menudo tratan de explotar las vulnerabilidades tras la pérdida de un empleo. Por ahora, está por ver cómo afectarán estos descuidos a la seguridad nacional a largo plazo.