Carlos Sainz cree -según sus propias palabras- que la temporada 2025 será más bien un año de transición, admitiendo que se tarda "unos seis meses" en acostumbrarse correctamente a un coche, algo que conoce bien ya que ha estado en cinco equipos, debutando con Willians este año. Hay que admitir que las perspectivas de otra victoria o podio para el español de 30 años son escasas, pero aun así consiguió la vuelta más rápida en el segundo día de pruebas en Bahréin.
A diferencia de la mayoría de los equipos, Sainz permaneció en el coche todo el día, durante las sesiones de la mañana y de la tarde. A pesar de algunas complicaciones debidas a la incesante lluvia, incluido un trompo, hizo el mejor tiempo en el circuito: 1m 29,348s, 0,031s más rápido que Lewis Hamilton en Ferrari.
"Hemos hecho algunos progresos con respecto a ayer, mejorando el equilibrio del coche y mejorando la sensación general con el coche", dijo Sainz. A pesar del orgullo de haber hecho el mejor tiempo en la segunda jornada de entrenamientos (algo que también hizo el año pasado con Ferrari), Carlos considera que no tuvo tiempo de hacer suficientes pruebas, ya que la próxima vez que se ponga al volante del coche de Williams será en Australia, el 14 de marzo. "Ojalá pudiéramos probar muchas más cosas, pero así es la Fórmula 1 hoy en día. De todas formas, me siento todo lo preparado que puedo estar con un día y medio de pruebas, e intentaremos ir a tope en Australia".