En una nueva medida para consolidar el papel del Reino Unido en el refuerzo de la seguridad de Europa, el Primer Ministro Keir Starmer ha anunciado planes para aumentar el gasto en defensa hasta el 2,5% del PIB de la nación para 2027, con un objetivo del 3% después de 2029 (vía Reuters).
Este paso, destinado a reforzar las defensas de Europa en medio de las crecientes tensiones geopolíticas, marca un cambio hacia la priorización de la inversión militar sobre la ayuda internacional. Starmer reveló que el Reino Unido destinaría 13.400 millones de libras adicionales al año a defensa para 2027, una medida que supondrá recortes en el presupuesto de ayuda internacional, reduciéndolo al 0,3% del PIB.
Mientras Starmer se prepara para reunirse con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en Washington, este aumento del gasto indica la intención de Gran Bretaña de intensificar su apoyo a la OTAN y contribuir más a la seguridad de Ucrania, especialmente si las conversaciones de paz con Rusia tienen éxito. Por ahora, está por ver si otras naciones europeas seguirán el ejemplo del Reino Unido y aumentarán su propio gasto en defensa.