Un avión no tripulado ruso atacó la central nuclear de Chernóbil el jueves por la noche, dañando la estructura protectora sobre la 4ª unidad de potencia, según un mensaje en X del presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky.
El ataque, que se produjo cerca de la frontera de Ucrania con Bielorrusia, provocó un incendio que fue extinguido posteriormente, y los niveles de radiación se mantuvieron dentro de los límites normales. El Organismo Internacional de Energía Atómica informó de que su equipo en el lugar oyó una explosión y confirmó posteriormente que había sido alcanzado el tejado de la estructura del Nuevo Confinamiento Seguro.
El refugio, terminado en 2017 tras décadas de esfuerzos internacionales, se diseñó para contener los restos del reactor, que explotó en 1986, extendiendo la contaminación radiactiva por toda Europa. Mientras tanto, el ejército ucraniano informó de que Rusia había lanzado un asalto masivo nocturno con 133 aviones no tripulados contra varias regiones.
El ataque se produce justo antes de la Conferencia de Seguridad de Múnich, en la que los líderes mundiales tienen previsto debatir la guerra en curso, mientras aumentan las tensiones por las nuevas maniobras diplomáticas de Estados Unidos y Rusia. Por ahora, está por ver cómo responderán Ucrania y sus aliados a este último ataque.