El laureado estudio Bungie, creador de franquicias míticas como Halo y Destiny, está atravesando una fase muy turbulenta en estos momentos. La compañía se ha enfrentado a despidos, críticas importantes e incluso ha retrasado su próxima gran expansión hasta el verano de 2024. Esto ha llevado al estudio a reconocer que ha perdido mucha confianza de la comunidad últimamente, y parece que podrían estar perdiendo algo más.
Porque en un nuevo informe muy esclarecedor de IGN, se dice que Bungie podría perder su independencia dentro de la familia de Sony Interactive Entertainment y PlayStation Studios, cuando se van a cumplir dos años de la adquisición.
El estudio mantiene su independencia siempre que alcance sus objetivos financieros, pero una reciente reunión entre ejecutivos de Sony y de Bungie parece sugerir que los retrasos y los malos resultados de Destiny 2 ponen al desarrollador en peligro de que se disuelva su junta directiva y, por tanto, de que se integre de forma más significativa en SIE.
El informe también afirma que Bungie se enfrenta a un enorme dilema moral en estos momentos y que algunos desarrolladores describen el estado de ánimo en la empresa como "desmoralizador". Incluso hay declaraciones de desarrolladores que afirman que la dirección de Bungie expresó indiferencia e incluso hostilidad en el periodo previo a los despidos masivos.
Por si todo esto no fuera suficiente, el informe menciona que se referían al equipo de control de calidad de Destiny (QA) como "no desarrolladores" y que se topaban con una hostilidad cada vez mayor por parte de la dirección del equipo y de la empresa, incluso se enfrentaban a mayores medidas disciplinarias por problemas aparentemente menores.
El informe concluye con la declaración de un empleado anónimo que menciona que existe un sentimiento de "nosotros contra ellos" entre los trabajadores y la dirección de la empresa en estos momentos, y que "la confianza se ha erosionado".
La compra de Bungie fue el gran movimiento de Sony para nutrir a PlayStation de juegos de servicio continuo o GAAS. Si ambas partes no son capaces de cambiar las tornas, les habrá salido el tiro por la culata.