En Gamereactor somos fieles a una teoría y es que un juego puede costar 60 o 70 euros aunque solo tenga modo historia o modo multijugador. Lo hemos hecho con Rainbow Six: Siege, que no tenía de lo primero, y también con Rise of the Tomb Radier, al que le faltaba lo último. En ambos casos se puede decir que no hace falta lo que no tiene, y que quizá haberlo incluido podría haber sido perjudicial y haber descentrado un poco al equipo de su misión principal. Pero también hay algunas excepciones, estudios que son capaces de hacer un buen trabajo en ambos casos. Lo vimos recientemente con Treyarch y su forma de volver al modo historia en Call of Duty: Black Ops 3, y lo mismo hay que decir de Naughty Dog. Desde la segunda entrega han decidido ofrecer multijugador en las aventuras de Nathan Drake, y con Uncharted 4: El Desenlace del Ladrón, incluso se ha podido probar antes de tiempo gracias a una beta abierta a todos los compradores de la edición coleccionistas de PS4.
La primera impresión que te llevas es que estás en casa, al menos si has jugado en los títulos previos. La mezcla dinámica de verticalidad, la variedad de gadgets y la inclusión de los personajes que ya se han hecho un hueco en nuestros corazones hacen que esto se esté convirtiendo en tradición. Se empieza escogiendo una configuración, que puede ser predeterminada o una que hayas preparado y guardado previamente, y que incluye un arma larga, un arma secundaria, una granada, unas cuantas mejoras, apoyo y un artefacto místico. Para equilibrar el equipamiento hay que poner y quitar hasta ocupar los 25 huecos disponibles, por lo que si prefieres tener más ventajas puedes renunciar al arma secundaria, por ejemplo. Hay muchas opciones que dan lugar a un sistema de personalización profundo, pero que no es apabullante.
En la beta se ha dado la opción de escoger personajes héroes y villanos. Está Drake, y también están Charlie Cutter, Sully, Elena, Marlowe o Lazarevic. También se pueden modificar su apariencia y un comportamiento para situaciones cómicas, como por ejemplo ponerles un sombrero o hacer que tiren besitos.
Como ya se dijo, en esta prueba iban a estar disponibles dos de los ocho mapas que traerá el título de lanzamiento. Uno es La isla y el otro es Madagascar City, el primero se pudo ver en la PlaysStation Experience de 2014 y el otro en el E3 2015, aunque con modificaciones. Los dos son grandes e invitan a utilizar las nuevas mecánicas y las mejoras disponibles, es decir, a sacar partido de la verticalidad y a desarrollar las habilidades y poderes místicos disponibles. Por ejemplo, hay varios puntos que están suficientemente distantes como para cruzar con la tirolina para tratar de coger la espalda al enemigo, o riscos desde los que dejarse caer para coger atajos.
Otro elemento que tienen en común es que están diseñados como una ratonera, con multitud de caminos y de rutas para ir y venir de cualquier sitio. Nunca sabes por dónde te va a salir otro jugador y acaba provocando que haya enfrentamientos en cualquier parte, aunque pocas veces va a ser cara a cara, más bien por atrás, por arriba o por abajo. Naughty Dog ha logrado de esta forma tenerte siempre en tensión. Además, los escenarios son fácilmente destructibles por lo que vamos a tener muchas explosiones a 60 fps tras tirar una granada o disparar a un pilar. Es una demostración gráfica pocas veces vista en consola, y es que el multijugador de Uncharted 4 logra lo que siempre ha querido: crear momentos propios de una partida en solitario pero con más gente alrededor.
Todo lo relativo a la mística, que es la gran novedad en cuanto al personaje, le da un toque estratégico a las partidas. Se puede dar la vuelta al resultado en cuestión de segundos. Por ejemplo, La furia de Eldorado manda espíritus malvados que causan daño continuo a todos los rivales que estén en esa zona, y la piedra Cintamani crear una burbuja curativa que incluso puede hacer resucitar a un aliado caído en combate. Por otro lado, si consigues suficiente dinero durante la partida puedes gastarlo como quieras en conseguir más. Los poderes místicos funcionan muy bien en el entorno competitivo y además están tan bien hechos que mejoran la imagen general del juego. Una de las lecciones que el equipo habrá sacado de esta fase de pruebas es que les falta un poco de equilibrio, tanto aquí como en los apoyos, algunos tan fuertes que son capaces de cargarse a varios enemigos de una vez.
Más adentro, en la jugabilidad básica, hay que hablar de un sistema de control que ya está afinado y que se beneficia de la fluidez que le dan las capacidades para escalar y para esquivar, quizá por encima de la mayoría de juegos de acción en tercera persona. Es importante recalcar que, con el juego corriendo a 60 fps, lo que se consigue es un ritmo ininterrumpido que invita a moverse por los mapas en todas las direcciones y aprovechando todos los objetos. Lo que no ha quedado también es que tanto para rodar por el suelo como para cubrirse se utiliza el mismo botón, y hay ocasiones en las que el personaje no ejecuta lo que tú quieres que haga. Esperemos que lo ajusten un poco más o que dejen la opción de buscarse dos botones distintos para hacerlo.
Esto no es más que una prueba inicial, pero la real será cuando la gente se meta en los servidores y decida si lo usa solo para un rato o si decide quedarse durante un tiempo en ellos. También es cierto que solo lo hemos probado en duelo por equipos, pero habrá otros modos que pueden transmitir otras sensaciones, mejores o peores. De momento son un misterio.
Por el momento, estamos muy contentos y bastante impresiones con lo que ha dado de sí la beta del multijugador de Uncharted 4: El Desenlace del Ladrón, que sirve para que se reafirme como uno de los más esperados de 2016. No queda casi nada para el 18 de marzo, Drake está de vuelta.