Luis Rubiales, ex presidente de la Real Federación Española de Fútbol, fue condenado a pagar una multa de 10.800 euros a la futbolista Jenni Hermoso y una orden de alejamiento, al ser declarado culpable de agresión sexual al besar sin consentimiento a la futbolista tras ganar el Mundial 2023 en agosto de 2023. Sin embargo, él -así como otros ex miembros de la RFEF, incluido el entonces seleccionador Jorge Vilda- fueron absueltos de coacción, cuando intentaron cambiar el relato sobre el beso no consentido hablando con la futbolista y sus amigos y familiares, incluyendo amenazas discretas (tanto que el juez no las vio) sobre arruinar su carrera.
Aunque Rubiales no estaba contento y recurrió la sentencia, la futbolista y su entorno, incluidos sus compañeros, que casualmente jugaban con la selección española de la Nations League el mismo día de la sentencia, tampoco estaban contentos. Y tampoco lo estaban los fiscales de la Audiencia Nacional, que inicialmente pedían dos años y medio de cárcel, y ahora piden un nuevo juicio.
La fiscal Marta Durántez alega que no se tuvieron en cuenta algunas pruebas y que algunas cuestiones fueron "indebidamente rechazadas", y afirma que el juez José Manuel Fernández-Prieto, juez penal central de la Audiencia Nacional, no fue imparcial.
"<em>"No concurrió en el juzgador, cuanto menos, la exigible apariencia de imparcialidad, la que debe concurrir en el juez previsto en la Constitución, independiente de sesgos personales, así como imparcial y respetuoso con los derechos procesales de los intervinientes, incluido los del Ministerio Fiscal", fueron las palabras de la fiscal Durántez (vía El País).
Hermoso vive y juega ahora lejos de España, en el Tigres de México, donde asistió al gol más bonito y viral del año.